¿Cómo puedo balancear su hora de comida?
Cada niña y niño tiene necesidades específicas de alimentación, porque depende de su ritmo de crecimiento, actividades, características corporales y estado de salud. En general se recomienda una dieta en la que haya variedad de alimentos de los llamados tres grupos: 1. Verduras y Frutas, 2. Cereales y 3. Leguminosas y alimentos de origen animal; todos los grupos de alimentos deben incluirse en cada tiempo de comida.
Es relevante mencionar que las encuestas de nutrición señalan que niñas y niños no consumen suficientes alimentos de origen vegetal, por lo que debe ponerse atención especial en el consumo de verduras, de cereales como el arroz, maíz y trigo, y de leguminosas como el frijol. Es importante animarlos (no obligarlos) a comer verduras, acción que puede facilitarse si se les ofrecen crudas (aquellas que sea posible comerlas así) acompañadas de gotas de limón o de naranja, sin sal ni azúcar añadidos para que aprendan a disfrutar de los sabores naturales de los alimentos.
Otros consejos prácticos.
Beber agua simple todos los días: niñas y niños de 4 a 8 años de edad deben tomar 1 litro de agua, los escolares de 9 a 13 años de edad tomar aproximadamente litro y medio.
Que acompañen a sus padres o cuidadores a hacer las compras de alimentos
Que colaboren en tareas sencillas en la preparación de alimentos, por ejemplo mezclar los ingredientes de las ensaladas, servir el postre a base de frutas, etc.
Que vean a sus padres o cuidadores comer verduras, frutas, cereales integrales y beber agua simple de manera cotidiana.
No usar a los alimentos como premios o condicionantes para darles un regalo.
No prohibirles el consumo de golosinas, botanas, o la llamada comida rápida, pero sí enseñarles que son productos para consumo de vez en cuando y en poca cantidad.
Tener horarios establecidos para comer, comer sentados y en un ambiente tranquilo sin regaños ni distracciones (como la televisión o el celular).
Finalmente, recordar que niñas y niños tendrán variaciones de apetito que deben ser respetados y no obligarlos a acabarse todo lo que se les sirve en el plato o en la lonchera, porque esa presión de comer en exceso puede generar sobrepeso, estrés, e incluso alterar su sensación de saciedad..
Fuentes:
-Plazas M, Hernández CS y Hernández RZ. Nutrición del preescolar y el escolar. Capítulo 16 del libro Nutriología Médica, Kaufer M et al (editores), 5ª edición, Editorial Médica Panamericana, 2023.
-European Food Information Council. En: https://www.eufic.org/en/healthy-living/article/parental-influence-on-childrens-food-preferences-and-energy-intake